Alerta por la violencia doméstica

[dropcap]L[/dropcap]as cifras de casos de violencia doméstica que salen de la Policía levantan una nueva bandera: la preocupación de que las víctimas, ahora encerradas con sus agresores para protegerse del Covid-19, no se sientan seguras llamando a la Policía, o a un albergue, o acudiendo al tribunal.

Coraly León, directora ejecutiva de la Casa Protegida Julia de Burgos, aseguró que han visto una disminución en las llamadas de mujeres solicitando protección. La exhortación es a que lo hagan, aun si la única forma es llamar si salen al supermercado o a la farmacia.

Recordó además que para buscar asistencia en un albergue, no es necesario tener una orden de protección por lo cual las víctimas y sus hijos pueden acudir y solicitar el servicio.

“Las solicitudes de servicio han disminuido y lo que entendemos es que esto tiene que ver con que las víctimas están en un espacio cerrado con los agresores y no tienen un espacio para hacer la llamada”, dijo León. “Lo que estamos sugiriendo es que identifiquen un momento donde puedan estar solas, si salen a comprar alimentos o a la farmacia. El protocolo es el mismo. Seguimos dando el servicio”.

Recordó que para estas mujeres víctimas de violencia machista en sus hogares, hacer una llamada puede resultar en una amenaza a sus vidas.

“Si el agresor escucha esa llamada, eso las puede poner en riesgo”, sentenció. “Tienen ese agresor cerca en todo momento y eso lo hace más peligroso”.

Según los datos de la Policía, los incidentes de violencia doméstica reportados entre el 15 y el 23 de marzo son este año 25 menos que el año pasado. La cuarentena comenzó el pasado 15 de marzo. Para esa semana el año pasado se reportaron 185 y este año fueron 160.

Toman medidas por emergencia

León aseguró que han tomado medidas para evitar el contagio dentro del albergue y que tienen un espacio para separar una persona que resulte enferma. Dijo además que modificaron el protocolo para añadir preguntas sobre la salud de las mujeres que solicitan albergue y si han viajado. Recordó que han hecho recomendaciones al gobierno para que se le dé prioridad a las mujeres albergadas que necesiten la prueba del Covid-19 para minimizar la espera en los centros donde se realizan estas pruebas y garantizar un resultado rápido.

Explicó, además, que en el albergue solo está trabajando el personal esencial, pero que pueden ofrecer el servicio como de costumbre.

“Se han tomado medidas preventivas y hemos tomado los pasos para desinfectar los cuartos”, expresó.

Vilma González, coordinadora general de la Coordinadora Paz para la Mujer, dijo que hay mujeres víctimas de violencia doméstica que optan por no llamar a un albergue porque temen contagiarse con coronavirus.

“Hay que usar los recursos disponibles para llevar el mensaje de que los albergues están tomando las medidas necesarias. Igual que el gobierno lleva la información del contagio, deben llevar detalles sobre los albergues porque esto también le puede costar la vida a estas mujeres”, afirmó. “Los albergues están abiertos”.

El número para recibir servicios de la Casa Protegida Julia de Burgos es (787) 723-3500.

Fuente: elvocero.com

Leave a Comment