Aumenta la venta de armas en la Isla

[dropcap]A[/dropcap] tres semanas de la apertura de las armerías del País, se reflejan ventas diarias de cerca de $22,000 y semanales de sobre $110,000, lo que a su vez ha generado más de medio millón de dólares en ingresos al fisco.

Ariel Torres, presidente de la Corporación para la Defensa del Poseedor de Licencias de Armas de Puerto Rico (Codepola), quien aseguró que son largas las filas de las personas interesadas en obtener su licencia de portación de armas para defenderse de los criminales.

“Semanalmente le estamos enviando al Departamento de Hacienda más de $70,000 en recaudos de sellos y comprobantes. Se abrieron las armerías el pasado 8 de junio y hemos recibido una avalancha de gente que hace fila afuera en sillas de playa. Las citas para los cursos de tiro están disponibles a partir de agosto y septiembre. Los polígonos están haciendo mucho dinero. Están viniendo muchas mujeres y parejas interesadas en llenar la solicitud y comprar armas para su defensa”, afirmó el presidente de la entidad, que cuenta con sobre 10,000 socios.

La venta de armas y las solicitudes han reflejado un marcado aumento, por lo que tanto las 33 armerías del País, como los 32 polígonos, se han beneficiado de las personas que buscan protección y que quieren aprovechar los recientes cambios favorables de la Ley 168, que hace que el proceso sea más asequible al bolsillo del consumidor común.

“Recibimos a diario entre 90 y 130 solicitudes, porque ahora sacar un arma es mucho más económico con los cambios en la Ley de Armas. Antes, la renovación te salía en $240 y la licencia nueva en $650, pero ahora esos costos bajaron a $145 y $245, respectivamente. Otro cambio positivo es que ya no tienes que ir al tribunal para sacar la licencia y una vez la tienes, puedes portar el arma sin tener que hacer otra gestión adicional. Además, de que para tener la licencia no tienes que ser socio de un club de tiro como se exigía en el pasado. El proceso es, primero llenar la información de la solicitud, tomar el curso de tiro mandatorio y luego el ‘background check’ con la policía”, aclaró Torres.

El primer mes de la cuarentena decretada por el gobierno por medio de una orden ejecutiva, Codepola recibió de manera remota sobre 2,000 solicitudes para licencias de armas, como consecuencia del miedo de muchos trabajadores esenciales que tenían que transitar durante las noches por las calles vacías debido al toque de queda.

Fuente: elvocero.com

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